Energía solar térmica y fotovoltaica: diferencias

Energía solar térmica y fotovoltaica: en qué se diferencian y cuáles son son sus ventajas

Cuando hablamos de energías renovables, el Sol aparece como la fuente principal. Así como, en seguida, surge la duda sobre la diferencia que existe entre la energía solar térmica y fotovoltaica. Y es que en España gozamos de la climatología perfecta para el aprovechamiento de esta fuente renovable. Las horas de luz que tenemos al día nos permite un disfrute casi máximo. Muestra de ello, es la proliferación de sistemas de energía solar, tanto a nivel industrial como doméstico.

Por ello, en este post, nos vamos a centrar en la energía solar. Y más específicamente, en la energía solar térmica y la fotovoltaica. Los dos procedimientos más desarrollados para generar energía a partir del sol.

Sin embargo, existen diferencias sustanciales entre ambos sistemas que son importantes conocer. Sobre todo, si estás interesado en las energías renovables y crees que la solar es una buena opción para tus necesidades. En función de lo que vayas buscando, de tu presupuesto y el espacio del que dispongas tu decisión de compra irá dirigida a un modelo u otro.

Diferencias entre energía solar térmica y fotovoltaica

Energía solar térmica y fotovoltaica
Energía solar térmica, Öhsol y energía fotovoltaica, Smartflower

Como ya hemos comentado, ambas se nutren de la energía solar para aportar bienestar y confort a los hogares, en contraposición de las fuentes contaminantes. Sin embargo, mientras que la energía solar térmica aprovecha el calor del sol para hacer su función, la fotovoltaica la convierte para crear electricidad. Esta principal diferencia es la que marca el resto.

Aplicaciones:

La energía solar térmica -o también llamada termosolar- es usada principalmente para tres funciones. Calentar agua o ACS, como apoyo a los sistemas de calefacción y para la climatización de piscinas. Y es que su funcionamiento es sencillo. Gracias a la placa solar, se calienta el líquido que se almacena en el depósito. Este normalmente es agua que es utilizado para el ACS, pero también puede ser parte de un mecanismo de climatización.

La energía fotovoltaica, por el contrario convierte la luz del sol para generar electricidad. Dependiendo de su potencia, es utilizada para la iluminación y el abastecimiento eléctrico de electrodomésticos y aparatos electrónicos varios.

Proceso:

Tal y como su denominación indica, la energía termosolar se genera mediante un proceso térmico. Sencillamente, aprovecha el calor del sol convirtiéndolo en calor para el uso doméstico. Mientras, la fotovoltaica realiza un proceso químico, transformando la radiación solar en energía eléctrica.

Almacenaje:

Esta es otra de las diferencias más significativas entre ambos mecanismos. Mientras que la energía solar térmica sólo necesita de un depósito de agua, la fotovoltaica requiere un equipo de baterías.

Precio:

Precisamente por depender de un equipo de baterías, la compra de un sistema de energía fotovoltaica es más caro que de uno termosolar. Sin embargo, su mantenimiento es mucho más económico.

Diferencias, en definitiva, que como todo irán en consonancia con unas necesidades u otras. Si tienes alguna duda y necesitas una información más personalizada, nuestro equipo de ingenieros de PROINCO no durarán en ayudarte.

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