Cómo eliminar y prevenir las algas en la piscina

Algas en la piscina, agua verde

¿Notas tu piscina verdosa? ¿Las paredes y el suelo resbalan? Se trata del típico caso de algas en la piscina. Si es así, no te preocupes. Tu piscina no está mutando, simplemente hay que prestar más atención al mantenimiento de la piscina.

Como toda anomalía que se percibe en el agua de una piscina, es debido a una reacción química. Esta se puede producir por un exceso o falta de sustancias necesarias para el tratamiento del agua. Pero también hay factores externos como el sol, la lluvia o simplemente un uso continuado de la piscina, que debemos tener muy en cuenta en la limpieza de piscinas.

Pero vamos a ir paso por paso, tratando de entender exactamente por qué aparecen estas algas en la piscina. Qué consecuencias pueden tener. Y, sobre todo, cómo eliminarlas y prevenir su aparición.

Por qué salen algas en la piscina

Como acabamos de mencionar, existen factores internos y externos que pueden provocar que el agua de la piscina se vuelva verde.

En el post de piscinas anterior, hablábamos sobre cómo bajar el PH de la piscina. Y es que esta suele ser una de las principales razones por las que aparecen las algas. El exceso de un agua ácida o, lo que es lo mismo, un PH bajo, inferior a 7,2, puede llevar a la corrosión que trae consigo la presencia de metales. Estos metales suelen ser los responsables de que se formen algas en el agua. Así que, procura tener bien controlado el nivel del PH y mantenerlo entre 7,2 y 7,6.

Por tanto, la presencia de metales (sobre todo el cobre) en el agua es uno de los principales factores en la aparición de algas en la piscina. Sin embargo, no es solo consecuencia de un PH bajo. Algunos elementos naturales, como la lluvia o el viento, transportan esporas de algas que se reproducen en jardines o estanques cercanos. Estas llegan hasta el agua de la piscina y siguen su reproducción aquí.

El sol o las altas temperaturas también propician que nos encontremos con una piscina verde. Por eso, a veces vemos zonas de la piscina con algas, y otras sin rastro de ellas, depende de la incidencia del sol.

Cuáles son las consecuencias de tener algas en la piscina

La aparición de algas en el agua de la piscina es algo habitual, pero si no lo remediamos puede ser un problema con consecuencias importantes.

Debido a su rapidísima reproducción, debemos actuar con agilidad nada más ver el más mínimo síntoma. Y una vez que empezamos con el tratamiento de choque, no debemos dejar de controlarlo.

El agua verde en la piscina no sólo es desagradable estéticamente. Además de parecer poco higiénico, de hecho lo es. Si nos bañamos en una piscina afectada por las algas, es muy probable que nuestra piel lo note, además de los ojos y el pelo.

Asimismo, ya hemos dicho que una de las posibles causas de la aparición de algas, es un PH bajo. Y cuando el PH de la piscina no es neutro, el efecto del cloro se bloquea, por lo que la desinfección del agua no se produce ¿Qué significa todo esto? Que si nuestra piscina se vuelve verde, negra o mostaza el estado del agua es insalubre. Así que, hay actuar.

Además, las algas en el agua pueden afectar negativamente en la maquinaria de la piscina. Si no las eliminamos del todo, sus esporas pueden llegar hasta los filtros y la depuradora y llegar a contaminarlos.

Cómo eliminar y prevenir las algas

Cuando la invasión de las algas en la piscina es seria, debemos empezar por un tratamiento de choque. Esto quiere decir que hay que realizar una supercloración y ponerse a raspar con ímpetu todas y cada una de las paredes, así como el suelo de la piscina. Seguidamente, debemos poner en marcha el limpiafondos para que aspire la mayor cantidad posible de agua.

Una vez que hemos hecho una primera batida, debemos analizar y estabilizar el nivel del PH. Así, estamos listos para aplicar químicos desinfectantes y, sobre todo, el algicida.

Para eliminar por completo las algas y sus esporas, deberemos raspar y limpiar repetidas veces. Y, por supuesto, no abandonar el buen mantenimiento del agua.

Recuerda que el control de los niveles adecuados de PH, cloro, floculante, algicida y ácido isocianúrico son imprescindibles para disfrutar de una piscina cristalina y saludable.

No obstante, si notas que algo no funciona bien en la piscina, los especialistas de PROINCO tienen la solución que necesitas.