Por qué utilizar floculante para piscinas

Con el floculante para piscinas evitamos que el agua se enturbie

Con este calor, todos queremos disfrutar de una piscina siempre a punto. Pues bien, el floculante para piscinas es uno de los químicos responsables de mantener el agua de la piscina limpia. Concretamente, es el activo encargado de eliminar la turbidez del agua.

En esta época, en la que estamos siempre en remojo y en torno a la piscina, la suciedad se deposita rápidamente en el agua. Bien sea por factores externos como el polvo, que suele llegar a través del viento, la lluvia o por el simple movimiento de las personas al rededor de la piscina; o bien por factores internos como el sudor, los restos de crema solar o incluso la orina.

En definitiva, cuando vemos que el agua de la piscina se torna turbia, es que está saturada de partículas finas. Al tratarse de elementos diminutos, no llegan a ser filtrados. Igualmente, si hemos sometido el agua de la piscina a un tratamiento de choque contra las algas, puede que permanezcan remanentes de esos residuos.

Cómo actúa el floculante para piscinas

Es muy sencillo. El floculante recoge y aglutina todas esas minúsculas partículas y, posteriormente, se hunden al fondo de la piscina. El limpiafondos es el encargado de recoger y expulsar toda esa suciedad que se ha convertido ahora en una sola unidad. Sin embargo, hay partículas que no llegan a formar uniones lo suficientemente grandes como para hundirse. Por ello, acabarán llegando a las unidades de filtración de la superficie.

Técnicamente, esto es lo que se conoce como la floculación del agua. Gracias a los activos químicos floculantes, ese polvo fino o sedimentos dispersos se concentran, creándose una única masa de suciedad o flóculos. Así, conseguimos una limpieza y eliminación total de impurezas en el agua.

Cómo usar el floculante para piscinas

Para un buen mantenimiento y limpieza de piscinas, no sólo es importante una adecuada desinfección del agua. Como ya hemos hablado anteriormente en otros posts, tanto la cloración artificial, como la salina o la hidrólisis, se encargan, en esencia, de la esterilización del agua. Pero todos estos sistemas no se libran de la suciedad residual y necesitan por igual de los floculantes para conseguir un tratamiento de agua completo. El confort que aporta un agua no enturbiada es igual de importante que la higiene de una desinfectada.

Por ello, cuando observemos que el agua empieza a perder su claridad, debemos actuar.

Podemos encontrar floculante tanto en pastillas como líquido, granulado o en cartuchos. Sea cual sea el formato que se elija, siempre se recomienda que se aplique por las noches:

• Si es en pastillas o en cartuchos, simplemente introduce una pastilla por semana en el skimmer
• Si, por el contrario, es líquido o granulado, añade entre 125ml a 750ml por cada 50m³ de agua

Eso sí, antes de añadir floculante o cualquier otra sustancia, debemos medir los niveles de cloro y PH:

• PH entre 7.2 y 7.6
• Cloro entre 0.5 y 1.5gr/l

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